¿Ser o no ser?
El titulo de este artículo lo he
llamado de esta manera por una pregunta que me hicieron varias
personas en las últimas elecciones generales. ¿Es EQUO de
izquierdas? La razón principal de la pregunta fue que desde afuera
lo parece y si EQUO es de izquierdas que sentido tiene votarle cuando
ya hay otras opciones. Una buena pregunta que en su momento plantee
en una reunión de EQUO Cantabria. La respuesta que recibí no fue
muy clara así que yo plantee mi idea que os expondré aquí en más
detalle, pero antes de comenzar os tengo que decir que la postura
oficial de EQUO es que no somos de izquierdas ni de derechas, somos
ecologistas. No tenemos colores, somos multicolores.
En Noviembre vi una explicación de
porqué EQUO no es de izquierdas que me pareció valida en época de
elecciones. “La izquierda busca al igual que los partidos de centro
y de derechas un crecimiento continuo que es insostenible para
nuestro entorno. La que lo diferencia es que reparten la riqueza de
manera diferente que el resto. ”. Una buena descripción de la
izquierda y se podría confundir con los mensajes ecologistas de la
campaña pero si solo los comparamos con el ecologismo político. El
ecologismo es mucho más que eso y en EQUO al ser un partido político
solemos caer en solo hablar de ecología política. Pero la verdad es
que esta se queda muy corta si la comparamos con el ecologismo
completo, también llamado ecologismo profundo.
El ecologismo profundo comprende todo
nuestro entorno, nuestra manera de ver la vida, las relaciones
personales, la política , la economía, la ciencia y la
espiritualidad. Por ejemplo en el ecologismo profundo existe una
palabra que no tiene cabida en la política y esa palabra es amor.
¿Habéis visto alguna vez un político que diga que hace las cosas
por amor. Amor al prójimo, amor a la tierra, amor a su ciudad,
pueblo, país o planeta? En la política actual hacer cosas por amor
es cosas de adolescentes, hippies, religiosos o tontos. Este no es el
caso para un ecologista. Nosotros no tenemos miedo de hacer las cosas
por amor al prójimo, por amor a los animales, por amor y respeto a
nuestro entorno. Conceptos que se acercan o son iguales a conceptos
espirituales que hasta ahora han sido terreno de religiones. Por lo
menos oficialmente.
¿Entonces porqué parecemos de
izquierdas? Yo he visto dos razones principales. La ecología
política se basa en el respeto al individuo y al grupo (pero nunca
olvidando que somos otra especie más en este planeta) y cuando hay
argumentos políticos que defender las palabras que usamos se parecen
a las de la izquierda porque los dos ponen a todos los individuos al
mismo nivel. Estamos en contra que gobiernos, grupos, empresas o
individuos se pongan por encima como si tuvieran mas derechos que el
resto de la sociedad. Creo que estaréis de acuerdo que parece un
argumento muy de izquierdas.
La segunda razón que veo es que en
EQUO han entrado muchas personas que toda su vida han defendido ideas
de izquierdas pero por diferentes caminos se dieron cuenta que la
izquierda no es suficiente. Considerando los problemas que tenemos
hoy en día, se queda muy pero que muy corta. Cuando estas personas
plantean, discuten o comparan ideas políticas usan una base y
terminología normalmente utilizada en la izquierda. Cosa que he
visto que ha llegado a confundir a mas de uno a pensar que somos una
partido más de izquierda. Pero EQUO no es de izquierdas, es
ecologista y es multicolor.
¿Entonces qué puede contribuir el
ecologismo a la política? Primero que todo romper con el concepto
caduco de izquierda y derecha que todavía tiene a España tan
divida. Sé que la guerra civil Española dejó un abismo que los
años de dictadura no permitió curar. Se sabe que la única manera
de superar un dolor en el alma es enfrentándote a él , aceptarlo y
seguir adelante. Como cuando se pierde a un ser querido. Por esta
razón es importante aceptar y afrontar las muertes de civiles
durante la guerra. Sobre todo los que murieron después de acabar la guerra.
No para buscar culpables, sino para curar las heridas. Para llorar a
los muertos encima de una tumba con su nombre y seguir adelante. Esa
guerra no es la nuestra, fue la guerra de nuestros abuelos y algunos
padres en un entorno político y social que ya no existe (Ahora es un
mundo totalmente globalizado donde las empresas están muy por encima
de los gobiernos o ideologías.), pero si no curamos las heridas
nunca podremos estar unidos. Siempre quedará el estigma de que se es
de izquierdas o de derechas.
La lucha que tenemos como ecologistas
es la lucha actual. En contra del materialismo y egoísmo
desenfrenado a favor del amor y el respeto. El ecologismo es un
cambio de vida, pero uno basado en el positivismo. Donde hay que
trabajar para construir algo que nos permita seguir viviendo de
manera decente, cómoda y segura pero sin dejar a nuestros hijos y
nietos sin recursos o con un entorno contaminado. La lucha ecológica
no es solo una lucha política donde se elige un partido como EQUO y
espero que me solucione los problemas. Un ecologista asume la
responsabilidad de cuidar su entorno como algo personal y da igual
qué partido esté en el poder. Es una responsabilidad individual. A
este nivel el grupo, organización, partido o gobierno son
secundarios. Esta manera de ver las cosas se acerca más a la derecha
que a la izquierda. Otra prueba más que no somos ni de izquierdas ni
de derechas. Somos una opción que no existía hasta hace poco. Hemos
superado la vieja energía y estamos construyendo algo nuevo que es
la solución a los problemas y retos actuales.
También creo que la lucha que tenemos
los ecologistas es una lucha espiritual. Donde el amor a la Tierra
tiene cabida en la política. Sé que para muchos esta idea se acerca
demasiado a la religión y esta no suele acabar bien. Si es así,
probablemente estáis confundiendo religión con espiritualidad. La
religión es una doctrina apoyada por una organización (iglesia) que
utiliza la espiritualidad como método para atraer adeptos y así
garantizar su supervivencia. La espiritualidad es parte de nuestro
ser que se siente unida a las personas, Tierra y cosmos. Para
comprender la espiritualidad se puede mirar al budismo (Un estilo de
vida más que una religión) y sobre todo a las culturas indígenas
que son de las pocas que son realmente ecologistas. Los que hemos
crecido en culturas “desarrolladas” tenemos un duro camino antes
de ser realmente ecologistas. Un atajo puede ser comunicarse y
escuchar a las culturas indígenas de la tierra. Es por esto que
Greenpeace por años utilizó como reseña de su barco más
importante el Rainbow Warrior (Guerrero del Arco Iris) la frase de
las tribus americanas:
“Llegará un día en que la Tierra
enferme, y en ese tiempo nacerá una tribu de todas las razas y
pueblos del mundo que creerá en los hechos y no en las palabras.
Ellos trabajarán para sanar la Tierra y serán conocidos como los
Guerreros del Arco Iris.”.
La batalla de un Guerrero del Arco Iris
no es una batalla de clases. Es una batalla donde luchamos por la
supervivencia de la especie humana. Todos los humanos, incluyendo los
de izquierdas y los de derechas.
Vivimos en un mundo de prisas, de carreras, de contrarreloj, de comidas para llevar...un mundo que va tan deprisa que no nos permite tomarnos un minuto para valorar y digerir lo que ocurre en nuestro alrededor, un mundo en el que nos imponen reglas y en la que nos tapan la boca si nuestras ideas y convicciones no coinciden, con las ideas de una de las dos aceras que cubren el asfalto. EQUO es ese minuto que necesitamos para valorar nuestro alrededor por nosotros mismos, y tomar nuestras propias decisiones. EQUO es ese minuto que nos permite pararnos en mitad de un río de gente, que corre para no perder el metro. Y tú Alejandro, eres uno de esos segundos que forma parte del minuto de reflexión, que intentan quitarnos pero que nos pertenece por derecho. Espero que sigas dando vida a estas letras que tan necesarias son hoy en día. Mis felicitaciones más sinceras.
ResponderEliminarComparto lo que ha expresado Elisabeth.Estamos muy necesitados de reflexión.
ResponderEliminarSaludos
Hola Alejandro.
ResponderEliminarComparto todas tus reflexiones y añadiría un par de ellas que se conectan entre si.
1- Hoy en día el centro del universo es EL DINERO.
" Poderoso caballero don dinero" que ya dijo Quevedo.
Los mercados mandan.
EL DINERO, es y será nuestro Dios, Amo y Señor.
Nosotros somos sus siervos.
¡ALABADO SEA EL SEÑOR!.
Amén.
Estamos sobre todo, aunque no sólo, ante una crisis de valores que se resume en: nada se antepone al dinero.
Dentro de poco volveremos a cerrar fronteras para las personas pero no para el capital. Se dará entonces la paradoja de que el capital inanimado vuelva a tener mas derechos que las personas…jua jua…
2- Ecologismo de izquierdas o de derechas.
¿Amar a tus hijos es de derechas o de izquierdas?.
La pregunta anterior es igual de impertinente que plantearse si el ecologismo es de izquierdas o de derechas. ( No lo digo por tus reflexiones sino por el debate que tanto tú como yo intentamos superar con respecto a este punto).
Amar a la Tierra y más concretamente al lugar en el que vives no es de derechas ni de izquierdas. EL ECOLOGISMO es de SENTIDO COMÚN. Hay algunos partidos que hacen mas acopio de él y otros menos.
Lo que pasa es que (y con esto uno esta reflexión a la anterior), algunos anteponemos ecologismo a dinero, buscamos el beneficio colectivo de vivir en un lugar sano para todos frente al beneficio particular de vivir en un lugar bueno para el que lo pueda pagar.
¿Dónde vamos a vivir cuando perdamos nuestra casa?, ¿ debajo de un billete de 20 euros?.
Creo que no deberían existir partidos verdes porque todos tendrían que incluir en sus programas estas cuestiones. Hasta que no lleguen a mínimos yo votaré ecologismo, votaré EQUO.
"Si quieres resultados distintos, no hagas siempre lo mismo". Einstein.
Gracias Rafi. Una respuesta excelente.
ResponderEliminarEnhorabuena por tu blog, Alejandro.
ResponderEliminarÁnimo con esta nueva tarea de compartir pensamientos. Nos hace también pensar a los demás... y eso está muy bien.
Creo que compartimos la idea de que políticamente los términos “izquierda” y “derecha” están totalmente desfasados. Si me apuras, también otros “pares” como conservador/liberal, moderado/radical, reformista/revolucionario... incluidos cuando van combinados con los sufijos neo-, ultra-, centro-...
Todas éstas son denominaciones ambiguas en la práctica, pues cada uno entiende lo que le parece o se apropia de las palabras dándolas nuevos significados. Es como una torre de babel léxica sin un marco de referencia común... Mira, por ejemplo, lo que cada cual entiende por la palabra “sostenibilidad” y cómo se emplea (a veces de forma aberrante)...
Quizá, lo común a todos estos “vocablos” políticos sea el intento de diferenciarse frente a los demás.
Compartimos también, creo, la idea de que a fin de cuentas todas estas clasificaciones “izquierda vs. derecha” y demás, a nosotros nos parecen nada útiles porque son muy parecidas en la realidad, responden a distintas visiones pero de un mismo modelo basado en el crecimiento económico sin fin y a pesar de una gran parte de la humanidad (actual y futura)...
Tener esa “certidumbre” de que esto no puede seguir así y esa “conciencia” de que es vital dar un cambio a nuestro modelo de vida urgentemente, ¿nos hace ser “conscientes” (por encima de “ecologistas”) y, por tanto, el resto serían “inconscientes”?
A lo mejor tenemos que empezar a clasificar la escena política así: entre los conscientes y los inconscientes.
;-)
JULIÁN DÍAZ-UBIERNA
Muchísimas gracias por vuestros comentarios. Me hacen reflexionar cuando los leo y me plantean nuevas ideas que empiezan a crecer y que tengo ganas de plasmar en el próximo artículo.
ResponderEliminarJulián. Me ha encantado la nueva clasificación de consientes e inconscientes. ¡ Fantástico! Habrá que empezar a usarlo ;-)